Visa dio un paso decisivo en la evolución de las stablecoins dentro del sistema financiero tradicional. La compañía anunció el lanzamiento de Stablecoins Advisory Practice, una nueva línea de servicios de valor agregado dentro de Visa Consulting & Analytics (VCA), orientada a guiar a bancos, fintechs, comercios y empresas en la adopción estratégica de infraestructura basada en stablecoins.
El anuncio llega en un momento clave: el mercado de stablecoins ya supera los $250.000 millones de capitalización, mientras que el volumen de liquidaciones de Visa vinculadas a este tipo de activos alcanzó un ritmo anualizado de $3.500 millones al 30 de noviembre. Lejos de tratarse de un experimento, Visa está estructurando una oferta formal, consultiva y escalable alrededor de esta tecnología.
De la experimentación a la estrategia
La nueva práctica de asesoría no apunta a un público cripto nativo, sino a actores tradicionales que buscan entender cómo las stablecoins pueden integrarse a modelos de negocio existentes. Según Visa, el objetivo es ofrecer recomendaciones accionables sobre encaje de mercado, diseño estratégico e implementación, en un contexto donde la infraestructura y los marcos regulatorios comienzan a madurar.
Matt Freeman, vicepresidente senior de Navy Federal Credit Union, resumió el enfoque: las stablecoins pueden mejorar velocidad y costos en pagos, pero deben evaluarse como parte de una estrategia financiera más amplia, no como una solución aislada.
Qué incluye Stablecoins Advisory Practice
Apoyada en la red global de miles de consultores, científicos de datos y expertos en producto de VCA, la nueva práctica ofrece un conjunto de servicios diseñados para acompañar la adopción institucional:
Para bancos como Pathward y VyStar, que participaron en los primeros trabajos, el valor estuvo en combinar escala, conocimiento cripto y asesoría especializada, algo poco habitual en el mundo de la consultoría tradicional.
Una señal clara al sistema financiero
Carl Rutstein, responsable global de Visa Consulting & Analytics, fue directo: contar con una estrategia integral en stablecoins ya no es opcional en el entorno digital actual. Los clientes recurren a Visa no solo por su red de pagos, sino por su capacidad de navegar cambios estructurales dentro y fuera del sector.
El mensaje implícito es potente: las stablecoins dejan de ser una innovación periférica y pasan a formar parte del arsenal estratégico de los grandes jugadores de pagos.
Un camino que Visa ya venía recorriendo
Este movimiento no surge de la nada. En 2023, Visa fue una de las primeras redes de pagos globales en probar liquidaciones con stablecoins utilizando USDC. Hoy, la compañía ya cuenta con más de 130 programas de emisión de tarjetas vinculadas a stablecoins en más de 40 países.
Además, los pilotos más recientes de Visa Direct permitirán a empresas calificadas pre-financiar pagos transfronterizos con stablecoins y realizar desembolsos directos a billeteras de stablecoins, reforzando su rol como puente entre blockchain y pagos tradicionales.
El cambio de fase
Con el lanzamiento de Stablecoins Advisory Practice, Visa deja claro que el debate ya no es si las stablecoins encajan en el sistema financiero, sino cómo y a qué velocidad se integran. La adopción institucional entra en una nueva fase: estructurada, asesorada y alineada con estándares globales.
Para el ecosistema, la señal es inequívoca. Cuando Visa convierte las stablecoins en una práctica formal de negocio, la frontera entre finanzas tradicionales y cripto deja de ser teórica y empieza a ser operativa.
